En aquel tiempo, habló Jesús diciendo: “¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que se parecen a los sepulcros encalados! Por fuera tienen buena apariencia, pero por dentro están llenos de huesos y podredumbre; lo mismo ustedes: por fuera parecen justos, pero por dentro están repletos de hipocresía y crímenes.
¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que edifican sepulcros a los profetas y ornamentan los mausoleos de los justos, diciendo: ‘Si hubiéramos vivido en tiempo de nuestros padres, no habríamos sido cómplices suyos en el asesinato de los profetas!’. Con esto atestiguan en contra de ustedes, que son hijos de los que asesinaron a los profetas. ¡Colman también ustedes la medida de sus padres!”.
Palabra del Señor.